Según aldeanos, la vaca habría sido violada por un anciano, que meses antes había sido descubierto cometiendo el acto. Temían que el embarazo fuera producto de esa relación sexual.
Aldeanos de Julah en Tejakula, en la provincia indonesia de Buleleng, remolcaron a mar abierto una vaca preñada, en ritual de sacrificio para deshacerse del animal que –creían- había sido violada por un hombre.
El animal, con un embarazo de cinco meses, fue arrastrada cerca de 3 kilómetros en aguas abiertas.
El hombre también fue llevado al mar a bordo de un bote, y allí fue obligado a desvestirse y arrojar su ropa al mar para simbolizar la limpieza de sus pecados y evitar males a la aldea.
El jefe de la aldea dijo que el ritual, llamado gamya gamana, se ha llevado a cabo allí durante generaciones y que una reunión de residentes locales tomó la decisión de llevarlo a cabo, para este anti-natural acto.
De acuerdo con los reglamentos habituales, el autor, identificado sólo como P.S. (¿?), de 70 años, fue sancionado a pagar la costosa ceremonia, incluída la vaca.
¿Y por qué no ahogan al viejo weón mejor?
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